Ante los efectivos, la causa fue caratulada como "robo agravado" y quedó a cargo de la Fiscalía en turno, que ordenó el análisis de cámaras de seguridad para identificar a los responsables del ataque.
Por otro lado, los investigadores hablaron con la jubilada y mencionó: "Me apuntaron con un arma y me taparon la cara con una frazada. Solo quería que se fueran y que no me lastimaran".
Por último, recordó que los ladrones le exigían dinero de manera agresiva y que no tuvo más opción que quedarse inmóvil mientras revolvían toda su vivienda. "Fueron los peores minutos de mi vida. Escuchaba cómo rompían todo, sentía sus pasos y no podía hacer nada", concluyó la mujer.